Una mujer de 38 años de edad, identificada como Ana Evelin Ardilla Pérez, falleció durante un procedimiento estético en lo que parece ser presuntamente un «quirófano clandestino».

El incidente ocurrió en un inmueble ubicado en un tercer piso, cerca del Parque del Periodista. Ana Evelin llegó acompañada de un familiar con la intención de someterse a una cirugía estética abdominal. Según informes de la Policía y la Fiscalía, tres individuos que supuestamente estaban a cargo de la operación abandonaron el lugar inmediatamente después de que la mujer emitió un grito aterrador, poco antes de perder la vida.

La inspección del cuerpo reveló una herida abierta en el abdomen, lo que ha llevado a las autoridades a calificar el lugar como presuntamente un «quirófano clandestino». Este tipo de prácticas, realizadas por personas sin las competencias adecuadas, representan un grave riesgo para la salud de los pacientes. Carlos Valdivieso, presidente de la Sociedad de Cirugía Plástica de Antioquia, expresó su preocupación: «Es desgarrador recibir noticias como esta. La cirugía plástica estética debe ser realizada únicamente por médicos especialistas en cirugía plástica, quienes poseen la formación y la experiencia necesarias».

El inmueble donde se realizó la cirugía había sido arrendado dos meses antes bajo la apariencia de un spa, según declaraciones del administrador del edificio. Este testimonio ha sido corroborado por varios vecinos, quienes aseguraron no tener conocimiento de que se estaban realizando procedimientos quirúrgicos en el lugar.

La creciente popularidad de las cirugías estéticas ha llevado a muchas personas a buscar procedimientos más accesibles, a menudo sin la debida diligencia en la elección de profesionales calificados. Este caso pone de manifiesto los peligros que enfrentan los pacientes que optan por procedimientos en clínicas no autorizadas, donde la falta de regulación puede llevar a consecuencias fatales.

Las autoridades han comenzado una investigación exhaustiva para dar con el paradero de los tres individuos que estaban a cargo de la operación. Se ha hallado un carné a nombre de una supuesta profesional de la medicina en el lugar de los hechos, lo que ha añadido un nuevo elemento a la investigación.

Este lamentable suceso también ha despertado un llamado a la acción entre las organizaciones de salud y las autoridades locales para reforzar la regulación y vigilancia de los procedimientos estéticos en Medellín. Valdivieso añadió que es fundamental que la población esté informada sobre los riesgos de las cirugías realizadas en lugares no autorizados, subrayando la importancia de verificar la idoneidad de los profesionales antes de someterse a cualquier intervención.