Evelyn Rodas, expareja de Brayan Campo, le consedió una entrevista a Jay Alarcón y reveló detalles del asesino de Sofía Delgado. Foto: Screenshot

Evelyn Rodas vive su propio suplicio. Tras confirmarse que su esposo, Brayan Campo, asesinó cruelmente a Sofía Delgado su vida dio un total vuelco. Hoy vive escondida, no puede estar con su hija de 4 años por las innumerables amenazas y desde que recuperó la libertad no ha visto la luz del sol.

En una entrevista concedida al creador de contenido Jay Alarcón, reveló detalles hasta ahora desconocidos del comportamiento de Campo tras cometer el crimen que conmocionó a Colombia.

Aterrador para ella, es el hecho de que su esposo nunca mostró remordimiento o nerviosismo tras el hecho. Dijo que ese domingo 29 de septiembre su comportamiento fue como todos los domingos, comió como si nada, se duchó y se pusieron a ver películas como acostumbraban.

“Era completamente normal. Él nunca me mostró nervios. Incluso ese mismo día (29 de septiembre) todo lo que le serví se lo comió normalmente. Nosotros estábamos acostumbrados a que todos los domingos nos veíamos una o dos películas en las noches y ese día transcurrió con normalidad. Toda la semana estuvo totalmente normal”, reveló.

Así empezó a sospechar

Frente a su supuesta colaboración en el crimen aseguró que es completamente inocente y que fue ella la que abrió el negocio al día siguiente (30 de septiembre) y no encontró nada que indicara que allí hubiese pasado algo: “el local estaba limpio”.

Después de unos días empezó a sospechar, pues las autoridades la habrían abordado varias veces para preguntarle del caso y fue en ese momento en que ella empezó a dudar y confrontó al que hasta hace unos días era su pareja sentimental.

“La excusa de él siempre era que lo querían involucrar en el proceso por lo que ya tenía un caso anterior, el caso del que yo tenía conocimiento y hasta donde yo tenía conocimiento era como una trampa que le habían hecho a él (…) Él decía que ‘si pague por una injusticia voy a pagar por otra injusticia’”, con dudas ella decidió confiar en su palabra.

El día de la captura

El 16 de octubre la vida le cambió para siempre a Evelyn. A ella y a su esposo los capturaron como sospechosos del asesinato de la niña de 12 años que llevaba desaparecida 19 días: “El día de la captura estaba en total negación porque no me cabía en la cabeza cómo yo podía estar involucrada en eso”.

Recordó que, por presión de las autoridades, le preguntó a su esposo en varias oportunidades que si él tenía algo que ver en el crimen y la respuesta siempre fue que no. “Mirándome a los ojos me decía que no, que no había sido él. Que era inocente”, aseguró.

Ella, pese a lo que estaba sucediendo, seguía creyendo en su inocencia, hasta el día que iban a entrar a la audiencia. En ese momento le volvió a preguntar que si tenía algo que ver con el asesinato de Sofía y ahí fue que supo la verdad, aunque el hombre no le dijo una sola palabra.

“No me miró a los ojos, miró hacia abajo y hacia un lado e inmediatamente yo me puse a llorar”, dijo y recordó que le pidió a uno de los investigadores que la alejaran de él porque lo iba a golpear. Le preguntaron que si había dicho algo y ella les contestó que con palabras no, pero que ella ya sabía que él había matado a la niña.

Campo en ese momento decide confesar a las autoridades lo que había hecho y a dónde había abandonado el cuerpo y que su esposa nada tenía que ver.

Se quedaron sin nada y teme por su vida

Antes de ser liberada por falta de pruebas, Evelyn se enteró de que la comunidad le había destruido su negocio y quemado su casa.

“Yo con ese negocio pagaba la guardería de mi hija, me dejaron sin nada, incluso se llevaron los perros y los dieron en adopción. Mi familia trató de reclamarlos pero la gente no lo permitió (…) solo me quedé con lo que tenía puesto y una susadera, lo perdí todo”, aseguró en la entrevista.

Lo peor de todo, según ella, es que no puede estar con su hija, que también se llama Sofía, porque ha recibido amenazas en redes sociales donde le dicen que la van matar a ella y a su pequeña, por lo que ambas permanecen escondidas y distanciadas.

“Yo realmente no tengo la culpa de los actos que haya cometido él y, mucho menos, mi hija que es un ser inocente. Es una niña que no merece esto porque yo digo que es que ella no merece esta vida que le tocó”, le dijo al creador de contenido.

Aprovechó también para pedir perdón a la familia de Sofía por lo que hizo su expareja.

“A la señora Lady yo quiero pedirle una disculpa en nombre de Brayan porque no me parece justo lo que hizo. Incluso, yo se lo dije a él: ‘hubiese preferido que me mataras a mí y no a una niña’. Por que yo también soy mamá y mi hija también se llama Sofía y me duele (…) Yo lamento mucho la muerte de su hija y que haya tenido que ser mi expareja el verdugo de esa niña”, concluyó.