Continúa el desplazamiento y confinamiento. Por la siembra de minas antipersona, más de 25 familias de las comunidades indígenas de Murindó no han podido regresar a sus tierras.
Continúa el desplazamiento y confinamiento. Por la siembra de minas antipersona, más de 25 familias de las comunidades indígenas de Murindó no han podido regresar a sus tierras.