Desde hace siete años una sicóloga paisa ha prestado apoyo humanitario en los conflictos armados más complejos del mundo, el más reciente, la guerra en Ucrania en donde vivió tres meses entre alertas de sirenas y explosiones de bombas.
Desde hace siete años una sicóloga paisa ha prestado apoyo humanitario en los conflictos armados más complejos del mundo, el más reciente, la guerra en Ucrania en donde vivió tres meses entre alertas de sirenas y explosiones de bombas.