Con palos, puños y patadas fue asesinado Jhon Jairo Manyoma, señalado de arrojar desde un edificio a Salomé Manyoma, su hija de 5 años, y quien también murió.

La comunidad de  Torres de Alamadina de Jamundí golpeó al hombre tras arrojar a su hija de un edificio. Éste murió. Foto: Screenshot

Luego de recibir la alerta de un altercado que ocurría en el barrio El Rodeo de Jamundí, los patrulleros de la Policía se coordinaron para atender la que de antemano se suponía como una delicada situación. Al llegar encontraron a una niña de 5 años a la que su padre había lanzado desde un edificio de la unidad residencial Torres de Alamadina.

A la vez, según algunos testigos, encontraron una turba enardecida que golpeaba al hombre con palos puños y patadas. Los policías trataron de proteger a Jhon Jairo Manyoma, como fue identificado el sospechoso, pero la comunidad no dejaba de golpearlo brutalmente por lo que había hecho.

Incluso, algunos de los que participaban en el linchamiento, habrían agredido a los uniformados y a las patrullas que llegaron a atender el caso, al igual que lo hicieron con el CAI de la Policía donde llevaron al hombre antes de ser trasladado a un hospital donde horas después murió.

Tras el hecho, que ha causado conmoción en el país, las autoridades iniciaron las respectivas investigaciones para identificar a las personas que le ocasionaron la muerte a Manyoma y quienes tendrán que responder, según la ley, por homicidio.

“La ciudadanía toma justicia por mano propia (…) y lastimosamente se verán inmersos en la comisión de delitos. En este caso se cometió un homicidio y también demos investigar y esclarecer quiénes fueron las personas que golpearon a este ciudadano”, indicó el coronel Germán Manrique, subcomandante de la Policía del Área Metropolitana de Santiago de Cali.

Podrían terminar en la cárcel

De acuerdo con el Código Penal colombiano las personas que participen en un linchamiento en el que se le ocasione la muerte de una persona o un daño grave, están cometiendo un delito grave que podría ser sancionado con varios años de prisión.

Las penas por dicho delito oscilan entre 12 a 20 años de cárcel, aunque esta puede aumentar dependiendo de los detalles del caso, por ejemplo, si se trata de un asesinato premeditado o particularmente brutal.

De llegarse a demostrar que hubo un acuerdo mutuo para llevar a cabo el homicidio también podrían imputarle por conspiración o instigación al crimen, lo que puede acarrear más años de detención.

El coronel Manrique, por su parte, le recordó a la ciudadanía que son las autoridades las responsables de capturar y llevar ante la justicia a los responsables de cualquier delito o crimen, por más aterrador que parezca.

“Queremos hacer un llamado precisamente a eso, a esperar a que sean las autoridades, la Policía Nacional la que realice la captura de cualquier persona que cometa un delito, no tomar justicia por mano propia”, recomendó el oficial.

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