Extraoficialmente se habla de 30 muertos tras enfrentamientos entre disidencias de las Farc y el Eln en la región del Catatumbo (Norte de Santander). Hay casi un centenar de familias desplazadas.
Los enfrentamientos entre disidencias de las Farc y el Eln dejan 30 muertos según información extraoficial. Foto: Screenshot
Por asesinar a firmantes de paz de las extintas Farc en la región del Catatumbo (Norte de Santander), el presidente Gustavo Petro suspendió los diálogos de paz que su gobierno adelantaba con la guerrilla Eln a quien acusan de matar a varios excombatientes a quienes habrían sacado de sus casas en diferentes municipios y veredas del departamento.
“Lo que ha cometido el Eln en el Catatumbo son crímenes de guerra. Se suspende el proceso de dialogo con este grupo, el Eln no tiene ninguna voluntad de paz”, escribió en su cuenta de X.
Lo que ha cometido el ELN en el Catatumbo son crímenes de guerra.
Se suspende el proceso de dialogo con este grupo, el ELN no tiene ninguna voluntad de paz.
— Gustavo Petro (@petrogustavo) January 17, 2025
Y es que en videos publicados en redes sociales se puede ver a los subversivos que, con un martillo ‘rompepuertas’, ingresan a las viviendas de los excombatientes para sacarlos de sus casas y asesinarlos.
Así, casa por casa, buscó esta mañana el ELN a los firmantes de paz Albeiro Díaz Franco y Yurgen Martínez Delgado, en el corregimiento San Pablo, de Teorama, en el Catatumbo. Horas después, los dos hombres fueron hallados muertos en esta zona de Norte de Santander. Otros dos… pic.twitter.com/65rYb6hhuT
— Manolesco (@jhonjacome) January 17, 2025
Luego de esto se produjeron varios enfrentamientos entre esa guerrilla y las disidencias de las Farc en distintos municipios de Norte de Santander que, hasta el momento, según información extraoficial, podrían dejar 30 muertos, muchos de ellos firmantes de paz.
La decisión del Gobierno Nacional coincidió con un comunicado emitido por el Frente de Guerra Nororiental del Eln en el que advertían que “seguirá corriendo sangre” mientras alias ‘Richard’, uno de los comandantes de las disidencias en esa zona, no se entregue.
En el mismo documento, a su vez, declara objetivo militar a empresas como Ecopetrol y algunos comerciantes del Catatumbo a quienes acusan de hacer negociaciones “negociaciones debajo de la mesa».
‘Era necesario’: comisionado de Paz, Otty Patiño
El alto comisionado de Paz, Otty Patiño, se pronunció frente a la decisión del presidente Petro de suspender los diálogos con el Eln.
“Es triste, por supuesto, pero era necesario. Son decisiones del Eln, ellos tienen como objetivo tratar de mantener el control fronterizo colombo-venezolano”, aseguró en una entrevista concedida para La Fm.
Ver: El ultimátum del comisionado de paz al ELN
Reveló, al mismo medio, que los combates iniciaron después del triple homicidio en el que involucró a Miguel Ángel López, su esposa y su pequeño hijo de 6 meses de nacido. “Mataron hasta al sepulturero de uno de los municipios, esto demuestra que no están en función de la paz”, acusando a la guerrilla del crimen.
Partido de las extintas Farc se pronuncian
En un comunicado a la opinión pública, el Partido Comunes, que nació tras la negociación de paz entre las Farc y el Estado, se pronunció frente a la delicada situación, condenando el asesinato de los excombatientes y le exigieron al presidente Petro que tome cartas en el asunto.
“Presidente Gustavo Petro, su gobierno debe garantizarle la vida a quienes depusimos las armas hace 8 años por el bien común de la nación y a todas las comunidades en los territorios. Hoy, después del asesinato aleve de 7 de los firmantes no caben excusas ni dilaciones”, escribieron en su cuenta de X.
“Presidente @petrogustavo, su gobierno debe garantizarle la vida a quienes depusimos las armas hace 8 años por el bien común de la nación y a todas las comunidades en los territorios. Hoy, después del asesinato aleve de 7 de los firmantes no caben excusas ni… pic.twitter.com/8091LTl2am
— Partido COMUNES 🌹 (@ComunesCoL) January 17, 2025
Asimismo calificaron de inaceptable y «contraria a los principios de humanidad y respeto por la vida el asesinato de, por lo menos, siete firmantes de paz y líderes sociales que, según ellos han trabajado por construir sociedad: “Su asesinato es un ataque directo a la democracia y la participación ciudadana”, concluyeron.