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Según estudios, las patas de pollo son una de las fuentes más ricas en colágeno, una proteína clave para mantener la piel firme, las articulaciones saludables y los tejidos jóvenes. Con el tiempo, la producción natural de colágeno en el cuerpo disminuye, lo que acelera el envejecimiento. Sin embargo, consumir patas de pollo ayuda a reponer esta proteína, reduciendo arrugas, fortaleciendo huesos y mejorando la elasticidad de la piel, lo que explica su impacto en la longevidad y el bienestar. (infobae)

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En Colombia, las patas de pollo han sido parte de nuestra cocina tradicional, pero pocos conocen su impresionante valor nutricional. Más allá de ser un ingrediente económico y versátil, son una fuente poderosa de colágeno, esencial para la piel, las articulaciones y la salud digestiva. Mientras muchas personas las descartan sin saberlo, industrias cosméticas y farmacéuticas las aprovechan para fabricar costosos suplementos. Sin embargo, el verdadero secreto está en nuestro propio plato.

Algunos de los increíbles beneficios de consumir patas de pollo:

1. Fuente rica en colágeno

Las patas de pollo contienen hasta cuatro veces más colágeno que cualquier otro alimento, ayudando a reducir arrugas, mejorar la elasticidad de la piel y fortalecer huesos y articulaciones.

2. Regeneración de cartílagos

Gracias a la condroitina, ayudan a restaurar el desgaste articular, aliviando dolores en rodillas, codos y columna.

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3. Mejoran la digestión

Contienen alcaloides hidrofílicos, que ayudan a sanar el intestino, reduciendo inflamación, gastritis y gases.

4. Fortalecen los pulmones

Gracias a la cisteína, favorecen la producción de moco protector, fortaleciendo las defensas respiratorias.

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Las patas de pollo son un superalimento que se puede tener al alcance de la mano. Anímate a incluirlas en tu dieta y aprovecha todos sus beneficios.

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