El ayudante del sheriff de Bethel Springs (Tennessee), Connor Brackin, es acusado de matar siete perro. El oficial de Policía fue retirado de su cargo mientras dura la investigación.
El ayudante del sheriff de Bethel Springs (Tennessee), Connor Brackin, es acusado de matar siete perros sin motivo alguno. Foto: Archivo particular
Un acto aterrador e incomprensible acabó con la tranquilidad de la pequeña comunidad de Bethel Springs (Tennessee). Un oficial de policía, ayudante del sheriff de la localidad, Connor Brackin, enfrenta una investigación por disparar y matar a siete perros durante lo que, en un principio, se reportó como un control de bienestar animal.
El incidente ocurrió mientras los propietarios de los animales estaban fuera, cenando. Según la información preliminar, Brackin fue enviado al lugar tras recibir una llamada relacionada con las condiciones de los perros. Sin embargo, lo que debía ser una evaluación terminó en la muerte de los animales.
Pese a la gravedad de la situación, hasta el momento, las autoridades del condado de McNairy no han emitido un comunicado ni han informado sobre las circunstancias exactas que llevaron a Brackin a disparar, pero según los testigos del hecho el ex oficial utilizó un rifle para matar a los perros.
Este caso desató la indignación en las redes sociales y en la comunidad local. Activistas de derechos animales y vecinos expresaron su consternación, organizando vigilias y protestas pacíficas frente a la oficina del sheriff.
«Esto no es justicia ni protección. Es una muestra de brutalidad incomprensible,» dijo Sarah Williams, voluntaria de un refugio cercano, durante una manifestación.
Entre las dudas que quedan es si Brackin actuó bajo algún protocolo establecido o si hubo fallas en su juicio para el manejo de la situación.
Los grupos de defensa animal exigen una revisión exhaustiva de las políticas de intervención en casos de bienestar animal, argumentando que este tipo de tragedias son evitables si se cuenta con la formación adecuada.