La Registraduría recordó que sus funcionarios no están obligados a registrar niños con nombres que podrían atentar contra la dignidad de los menores. Una cosa es un nombre raro o feo, y otra un nombre ofensivo o denigrante.
La Registraduría recordó que sus funcionarios no están obligados a registrar niños con nombres que podrían atentar contra la dignidad de los menores. Una cosa es un nombre raro o feo, y otra un nombre ofensivo o denigrante.