Los habitantes de Vigía del Fuerte, en el Urabá antioqueño, se están viendo obligados a regalar el pescado. La anhelada subienda los sorprendió sin un lugar para almacenar los peces.
Los habitantes de Vigía del Fuerte, en el Urabá antioqueño, se están viendo obligados a regalar el pescado. La anhelada subienda los sorprendió sin un lugar para almacenar los peces.