Antes de Medellín y sus grandes industrias, un pueblo escondía el secreto cervecero que inició la historia empresarial de Antioquia

no fue en Medellín, esta es la primera fábrica de AntioquiaImágenes tomadas del programa Relatos mágicos de Teleantioquia

Cuando se habla del origen de la industria antioqueña, la mayoría suele pensar en Medellín. Sin embargo, la historia demuestra que el punto de partida de la revolución empresarial paisa ocurrió en el municipio de La Ceja, donde se instaló la primera fábrica del departamento en 1864.

Fue allí donde Edward Nicholls Hughes, inmigrante británico con formación cervecera adquirida en Alemania, decidió establecerse tras su llegada al país en 1829. Su experiencia y visión lo llevaron a fundar la primera fábrica de cerveza de Antioquia, marcando así un hito en la historia empresarial de la región. El producto estrella fue una bebida con el nombre de PALE ALE. Hoy la podríamos catalogar como una cerveza artesanal, precursora de la cultura cervecera paisa.

Este hecho, relatado en el programa Antioquia Asombrosa de Teleantioquia, permite entender cómo La Ceja se convirtió en el epicentro inicial del desarrollo industrial antioqueño, años antes del auge manufacturero de Medellín.

Una tradición cervecera con casi dos siglos

La llegada de Edward Nicholls a Colombia no solo trajo una receta, sino también una visión de empresa. El británico se instaló entre Rionegro y La Ceja, zonas claves del oriente antioqueño, donde fundó la fábrica que daría origen a una tradición que perdura hasta hoy.

Con su conocimiento técnico, Nicholls impulsó un modelo de producción que abrió la puerta a otras industrias nacientes como la locería (cerámica vidriada), que para entonces no se elaboraba en la región. Así, La Ceja no solo fue pionera en la producción de cerveza, sino en la diversificación industrial de Antioquia.

De lo artesanal a la industrialización

El impacto de esta primera fábrica fue fundamental para lo que décadas después se conocería como la época de oro de la industrialización antioqueña. A mediados del siglo XIX, Antioquia todavía era una sociedad predominantemente agraria. Sin embargo, con la llegada de fábricas como la de Nicholls, comenzó un proceso de transformación económica y cultural.

Ya en el siglo XX, este modelo se replicaría en municipios como Bello. Allí, en 1906 nació la primera empresa textil, y en Medellín, donde se consolidaron empresas insignia como Coltejer, Postobón y la Fábrica de Licores de Antioquia.

Don Pepe Sierra: símbolo del espíritu empresarial paisa

La historia empresarial del departamento también tiene protagonistas inolvidables. Uno de ellos fue Don José María “Pepe” Sierra, un campesino de origen humilde que acumuló una de las mayores fortunas del país a principios del siglo XX.

A pesar de solo haber cursado hasta tercer grado de primaria, Don Pepe llegó a prestar dinero al Estado colombiano y a controlar sectores como el de la panela y los bienes raíces en el Valle de Aburrá. Su vida, relatada también en Antioquia Asombrosa, refleja el espíritu audaz, trabajador y visionario del empresario antioqueño, que ha sabido transformar obstáculos en oportunidades.

Ver: El influencer que le cambia la vida a habitantes de calle en Medellín: esta es su inspiración

Entre la pujanza y la violencia: una historia de contrastes

El siglo XX trajo consigo un auge industrial sin precedentes, pero también tiempos difíciles. Desde la violencia partidista de 1948, pasando por el surgimiento de los grupos guerrilleros y el fenómeno del sicariato en los años 80 y 90, la historia de Antioquia ha estado marcada por profundos contrastes sociales y económicos.

Uno de los mitos más arraigados surgió en este contexto: el de la Virgen de los Sicarios, fenómeno popularizado por la novela de Fernando Vallejo. Esta figura refleja el choque entre la religiosidad popular y la crudeza del conflicto urbano en Medellín, especialmente en barrios periféricos como Sabaneta.

Antioquia, tierra de reinvención

A pesar de todo, Antioquia ha demostrado una y otra vez su capacidad de reinventarse. Desde los arrieros del siglo XIX hasta los empresarios de la Medellín moderna, pasando por innovadores como Gonzalo Mejía, Gabriel Posada y Aníbal Obando, el departamento sigue siendo referente de emprendimiento en Colombia.

La historia de Edward Nicholls y su fábrica de cerveza en La Ceja no es solo una anécdota: es el punto de partida de un modelo empresarial que ha marcado la identidad paisa. Y es, sin duda, una muestra más de por qué esta región nunca deja de asombrar.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *