El reconocido presentador y su hijo, Jorge Andrés Barón, vivieron una amarga experiencia en Londres. En medio de una noche lluviosa y a falta de taxis, recurrieron a un servicio de transporte alternativo que casi les cuesta una fortuna. Aquí te contamos todos los detalles de este intento de estafa y la advertencia que lanzaron para otros turistas.

Foto: revista semana
Foto: revista semana

Jorge Barón, famoso presentador de televisión, y su hijo Jorge Andrés, fueron víctimas de un intento de estafa durante su visita a Londres. La situación ocurrió cuando tomaron un Tuk Tuk, más conocido en Colombia como Motocarro. Lo que debía ser un breve y económico viaje se convirtió en una pesadilla cuando el conductor les exigió una exorbitante suma de 540 libras esterlinas (aproximadamente $2´800.000 pesos colombianos). Ante la negativa de pagar dicha cantidad, el conductor comenzó a agredirlos verbalmente.

 

Intervención de las autoridades:

Afortunadamente, Jorge y su hijo no sufrieron daños físicos, pero la situación escaló hasta el punto en que tuvieron que recurrir a las autoridades locales para resolver el conflicto. La intervención policial evitó que tuvieran que pagar el abusivo monto y resguardó su integridad.

Advertencia a otros turistas:

Jorge Andrés Barón, quien estudia ciencia política y derecho en la Universidad de los Andes, aprovechó sus redes sociales para relatar el incidente y lanzar una advertencia a otros turista: «Esto sirve como una advertencia para los colombianos y latinoamericanos que vayan a viajar a Londres. Jamás tomen los Tuk Tuk», escribió en su cuenta de X. Destacó que el conductor se negó a informarles sobre el costo del viaje antes de iniciar el trayecto, intentando imponer la tarifa abusiva solo al final del recorrido.


Llamado a las autoridades londinenses:

Además de advertir a otros turistas, Jorge Andrés hizo un llamado a las autoridades de Londres para que regulen mejor este tipo de servicios y prevengan futuras estafas. «Esto es una estafa que tiene que ser denunciada. Las personas responsables no pueden seguir transitando porque están estafando a los turistas y afectando la percepción de seguridad de la ciudad», enfatizó.

Este incidente pone de manifiesto los peligros que pueden enfrentar los turistas en cualquier parte del mundo, incluso en ciudades consideradas seguras. La experiencia de los Barón en Londres es un recordatorio de la importancia de estar siempre alerta y conocer las regulaciones locales antes de utilizar servicios de transporte alternativo

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