Desde serpientes venenosas hasta gases tóxicos y tribus aisladas, descubre los lugares más peligrosos que el planeta tiene para ofrecer.

Isla de Queimada Grande, Brasil. Un paraíso prohibido donde miles de serpientes venenosas reinan, haciendo de este lugar uno de los más mortales del planeta. Foto: lareserva.com

 

  1. Isla Sentinel del Norte, India

Hogar de la tribu Sentinelese, esta isla es extremadamente peligrosa para los forasteros. Los habitantes son conocidos por rechazar y atacar a cualquier persona que intente acercarse.

 

  1. Isla de Queimada Grande, Brasil

Conocida como la «Isla de las Serpientes», este lugar alberga una de las mayores concentraciones de serpientes venenosas del mundo, la Bothrops insularis. Su veneno es extremadamente potente, lo que hace que esta isla sea altamente peligrosas.

 

  1. Isla Gruinard, Escocia

Utilizada para experimentos con ántrax durante la Segunda Guerra Mundial, la isla estuvo contaminada durante décadas. Aunque se declaró segura en 1990, sigue siendo una isla con un pasado peligroso.

Un empleado de limpieza posa junto al cartel que prohíbe la entrada al archipiélago, contaminado de ántrax. Información y foto tomada de: Cultura Inquieta

 

  1. Isla Miyakejima, Japón

Esta isla es conocida por su volcán activo, el Monte Oyama, que ha tenido múltiples erupciones. Además, la alta concentración de gases tóxicos, especialmente azufre, hace que vivir allí sea peligroso.


Dominada por el Monte Oyama, su volcán activo, y constantemente envuelta en nubes de gases tóxicos, los valientes residentes viven con máscaras de gas a la mano, siempre alerta a las erupciones. Foto: Japan Endiess Discovery.

 

      5. Poveglia: La Isla de los Muertos

Oculta en la brumosa laguna de Venecia, Poveglia, conocida como la «Isla de los Muertos», es un lugar envuelto en misterio y terror. Utilizada como una estación de cuarentena durante la peste bubónica y más tarde como un asilo psiquiátrico, la isla ha sido testigo de innumerables tragedias humanas. Se dice que los espíritus inquietos de las víctimas de la peste y los pacientes torturados aún rondan sus desolados edificios.

Estas islas son fascinantes pero peligrosas, y se recomienda extremar la precaución si se considera visitarlas.

 

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