Un equipo de 150 profesionales y contratistas trabaja intensamente en la inspección de las cabinas y sistemas para garantizar la seguridad y obtener la acreditación necesaria para retomar operaciones en la tercera semana de julio. Además, se extiende la revisión a los otros cinco Metrocables para prevenir futuros incidentes.
Foto: Metro de Medellín
La próxima semana se pondría en marcha el servicio en la línea K del Metrocable en la que se registró un accidente hace 15 días que dejó 20 personas lesionadas y una fallecida. El Metro de Medellín intensifica los trabajos de inspección que permitirán reanudar el servicio.
Las cabinas de este sistema de transporte operan en medio del proceso de inspección para determinar las causas del accidente el pasado 26 de junio.
Son 150 profesionales y trabajadores del Metro de Medellín, que con un contratista verifican aspectos tales como el sistema de control, frenos, motorización, pilonas y rodamientos.
Cada una de las cabinas está siendo inspeccionada de manera independiente. Estos procesos permitirán gestionar la acreditación para retomar el servicio que, según pronóstico del Metro, se podría llevar a cabo en la tercera semana de julio.
Durante los últimos días también se extendió la revisión a los otros 5 Metrocables, con el fin de descartar preventivamente cualquier anomalía que pueda generar un evento similar.
