El conflicto entre Israel y Hezbolá, una de las organizaciones paramilitares más poderosas del Líbano, llegó a un punto crítico en 2024 y todas las fuentes coinciden en que es cuestión de tiempo para que se declare una operación oficial de Israel en contra del grupo libanés. Después de años de tensiones y enfrentamientos esporádicos, los recientes ataques de Hezbolá y la contundente respuesta de Israel han encendido las alarmas de una guerra a gran escala en el Medio Oriente. Aunque los choques, atentados y bombardeos iniciaron hace meses, todavía no se le considera una guerra abierta a gran escala. 

• El conflicto ya ha causado el desplazamiento de casi un millón de personas en el Líbano.
• La muerte de civiles en ambos lados podría aumentar si la situación se descontrola.
• El riesgo de una escalada regional es alto, involucrando a actores como Irán y Siria.
• Las tensiones entre Israel y Hezbolá son cada vez más difíciles de controlar, lo que aumenta la probabilidad de una guerra total.
• La infraestructura civil del Líbano está gravemente dañada, lo que afectará a generaciones futuras.

El asesinato de Fuat Shuker, un importante comandante de Hezbolá, en un ataque aéreo israelí, ha intensificado las amenazas por parte de la organización respaldada por Irán, lo que podría desatar una escalada militar sin precedentes. Desde octubre de 2023, los ataques entre ambos bandos no han cesado, con más de 7,500 cohetes y misiles lanzados por Hezbolá sobre Israel, y más de 600 ataques aéreos israelíes sobre el Líbano. La frontera entre ambos países se ha convertido en un campo de batalla constante, donde el temor a una guerra regional está más latente que nunca. 

La influencia de actores externos, como Irán, y el apoyo incondicional de Estados Unidos a Israel, complican aún más la situación, y muchos se preguntan si esta vez las hostilidades se saldrán de control, desencadenando un conflicto devastador que afectaría a todo el Medio Oriente.

La guerra no declarada que sigue cobrando víctimas

Para entender el conflicto actual entre Israel y Hezbolá, es fundamental revisar su historia reciente y las causas de la escalada. Hezbolá, una organización chiita nacida en 1982 con el apoyo de Irán, ha sido un actor clave en la política y el escenario militar del Líbano. Su objetivo declarado es resistir la influencia israelí en la región, lo que ha resultado en una relación conflictiva desde su fundación. La guerra de 2006 fue uno de los momentos más críticos de esta relación, con un enfrentamiento devastador que dejó más de 1,000 civiles libaneses muertos y causó una destrucción masiva en ambos lados. 

A pesar del alto al fuego logrado por la ONU, las tensiones nunca se disiparon. El ataque de octubre de 2023 por parte de Hezbolá, lanzando miles de cohetes hacia Israel, reavivó las hostilidades, mientras Israel respondió con una fuerza militar aplastante, destruyendo infraestructura clave en el sur del Líbano. Hezbolá ha demostrado ser un enemigo formidable, con un ejército que se estima entre 60,000 y 100,000 soldados, bien armados y entrenados, además de contar con un arsenal de misiles capaz de desafiar los sistemas de defensa israelíes. La muerte de Fuat Shuker, uno de los principales líderes militares de Hezbolá, ha sido un punto de inflexión que ha llevado a la organización a prometer represalias. A medida que los ataques aumentan, la posibilidad de una guerra abierta entre ambos bandos parece cada vez más inminente.

Acciones de Hezbolá contra Israel en el último año:

• Lanzamiento de 7,500 cohetes y misiles contra objetivos israelíes desde octubre de 2023​.
• Ataque con cohetes en julio de 2024 en la localidad de Mdal Shams, en los Altos del Golán, que dejó 12 jóvenes muertos​
• Ataques fronterizos frecuentes en la frontera entre Israel y Líbano​.
• Amenaza de represalias tras el asesinato del comandante de Hezbolá, Fuat Shuker​.
• Lanzamiento de cohetes y uso de drones kamikaze dirigidos a las principales ciudades de Israel​.

Acciones de Israel contra Hezbolá:

• 600 ataques aéreos sobre Líbano en respuesta a los ataques de Hezbolá.
• Asesinato de Fuat Shuker, comandante de Hezbolá, el 30 de julio de 2024.
• Destrucción de infraestructura clave en el sur del Líbano, valorada en 1,700 millones de dólares​.
• Bombardeo de Beirut tras los ataques de Hezbolá en 2024.
• Ataques a posiciones militares y de artillería de Hezbolá en la frontera entre Líbano e Israel​.

¿Existe alguna solución a la vista?

El conflicto entre Israel y Hezbolá, ya que su impacto no solo afecta a los países involucrados, sino que tiene el potencial de desencadenar una crisis a nivel regional. La posibilidad de que el enfrentamiento se convierta en una guerra a gran escala entre Israel y Líbano podría tener graves repercusiones en la estabilidad del Medio Oriente, especialmente si actores internacionales como Irán se involucran directamente. Para Colombia, aunque el conflicto pueda parecer distante, las tensiones en el Medio Oriente siempre influyen en el precio del petróleo y en la seguridad global, lo que nos afecta indirectamente, tal como lo hizo la guerra de Ucrania.

*Este contenido fue depurado con la ayuda de Inteligencia Artificial, basado en información recolectada y redactada inicialmente por nuestro equipo periodístico. Su publicación y curaduría contaron con la revisión de un periodista y un editor humanos.

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