“Sor Margarita” o más conocido como Frank Tavares, es un dominicano que vivió 22 años haciéndose pasar por una mujer dentro de un convento de monjas. Aquí te contamos su historia.

“Sor Margarita” o más conocido como Frank Tavares, es un dominicano que vivió 22 años haciéndose pasar por una mujer dentro de un convento de monjas. Aquí te contamos su historia.Tomada de Notibomba/redes sociales

Frank Tavares nació con un problema en los genitales que hacía que las personas confundiesen su sexo. A los cuatro años perdió a sus padres a causa de un accidente automovilístico y sus abuelos lo entregaron a un lugar de monjas. 

Asegura no haber tenido amaneramientos, ni gustos asociados al género femenino, sin embargo, al ser criado por monjas su educación se tornó más hacia ese lado. A los siete años, surgieron su personalidad y preferencias; pero siguió vistiéndose como niña, aunque sexualmente le atraían las mujeres. 

María Margarita (Frank) a los 18 años ya era una monja y portaba hábito. Según él, con las monjas no tenía ningún tipo de acercamiento sexual, pero sí con las jóvenes que eran compañeras internas.

“De la que yo más me enamoré, Silvia, ella me perseguía todo el tiempo allá abajo en el convento. Respetamos ese lugar, porque nosotros ya sabíamos que esa era una casa sagrada de Dios. Todo pasó en una experiencia por fuera del convento, luego, se corrió la voz”, afirmó Frank para el programa Finanzas con Humor en una entrevista en julio de 2022.

Silvia lo buscaba para continuar el romance, incluso, dentro del convento y los retiros, pero ahí todo se complicó.  “Yo me enamoré de ser monja y quería ser hembra, para ser monja. Eso fue una lucha grandísima”, afirmó Frank Tavares.

El dominicano no tenía un problema de identidad, necesariamente. Lo de él, era más algo de pertenecer y de seguir la vocación religiosa. 

“Yo estaba en el noviciado, pero yo me sentía como un traicionero que estaba engañando a aquellas religiosas que fueron tan buenas conmigo. Ya nosotros (Silvia y yo) estábamos completamente enamorados y tampoco aguantaba estar bajo este engaño con un hábito”

Silvia era insistente frente al tema, le decía que saliera de ahí para que pudieran vivir su propia vida, ella quería una vida a su lado. “Lo último que me dijo Silvia fue que estaba embarazada. Yo le dije en otra carta que se aguantara, que me daba gusto que ella estuviese embarazada y que quería que fuese una niña y que se pareciese a ella”, afirmó Tavares.

Silvia había regresado a su hogar y las monjas empezaron a sospechar que algo le pasaba a Sor Margarita (Frank). La ex-maestra de Frank interceptó la carta, confrontó a Silvia y con la confirmación de ella, se desmanteló todo. Después, Frank fue expulsado en 1979, pero las monjas nunca lo desampararon y él nunca volvió a ver a Silvia.

El dominicano sabía los oficios de monja, entonces empezó a buscar trabajo en talleres como costurero. Ahí, fue escalando como empleado. Después, puso una casa de caridad, pero se quebró por exceso de bondad. Por lo tanto, tuvo que volver a sus dotes de sastre, actividad que lo ha mantenido hasta la actualidad.

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“Ahora, pertenezco a un grupo religioso que volvió a acorralarme, ya le prometí mi castidad a Dios”, afirmó Frank con 68 años. Sin embargo, Tavares no abandona sus antiguas andanzas y tiene una relación virtual con una mujer de Estados Unidos. 

“Yo nunca me bañé ni me desnudé enfrente de ellas, me iba para un bañito, yo usaba pantis estilo calzoncillo, yo fingía el periodo menstrual, usaba vestidos grandes”

Van cuatro ediciones del libro (Encrucijada en la sombra: El hombre que fue monja), donde Tavares narra su experiencia y los motivos que tuvo para arraigarse a esa identidad.

Finalmente, el hombre dice estar arrepentido, pero su jocosidad y doble sentido, dejan ver que seguirá saliéndose con la suya hasta su último día. 

 

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