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Con la llegada del Año Nuevo, millones de colombianos se preparan para despedir el 2024 y dar la bienvenida al 2025 siguiendo una tradición que ha pasado de generación en generación: los agüeros. Estas creencias y rituales simbólicos, cargados de significado cultural, buscan atraer buena suerte, amor, prosperidad o viajes en el nuevo ciclo que comienza.

Los agüeros hacen referencia a una acción considerada un presagio para el futuro.

Los agüeros más populares en Colombia

Entre los rituales más conocidos se encuentran:

1. Ropa interior amarilla:
Quizás el agüero más popular en el país, esta tradición simboliza la atracción de la prosperidad económica. Se dice que usar ropa interior amarilla al recibir el Año Nuevo actúa como un imán para el dinero y el éxito financiero.

2. Correr con maletas:
Este divertido ritual implica dar una vuelta alrededor de la manzana o de la casa con una maleta vacía. La creencia detrás de esta costumbre es asegurar muchos viajes y nuevas aventuras en el año que comienza.

3. Comer 12 uvas:
De origen español, esta tradición invita a comer una uva por cada campanada a la medianoche, pidiendo un deseo por cada una. Para muchos, es una manera de garantizar un año lleno de prosperidad y buenos momentos.

4. Lentejas en los bolsillos:
Guardar un puñado de lentejas en los bolsillos representa el deseo de atraer riqueza y abundancia. Esta costumbre es especialmente popular entre quienes buscan estabilidad económica.

5. Velas de colores:
Encender velas de distintos colores tiene un simbolismo especial. Cada tono representa un deseo: el rojo para el amor, el verde para la salud, el blanco para la paz y el amarillo para la riqueza.

Agüeros menos conocidos pero igual de interesantes

Además de las prácticas tradicionales, hay otros agüeros menos comunes que también han ganado popularidad:

Bañarse con champaña a medianoche:
Se cree que este ritual atrae abundancia y energías renovadas. Al realizarlo, las personas buscan comenzar el año con suerte y prosperidad.

Hojas de laurel en el zapato:
Al colocar una hoja de laurel en el zapato la noche del 31 de diciembre y quemarla al día siguiente, las personas buscan purificar energías y atraer bienestar.

Meter papas debajo de la cama:
Aunque suene inusual, esta tradición se asocia con la protección contra males espirituales y enfermedades. La papa actúa como un “escudo” simbólico que absorbe las energías negativas.

Más allá de las creencias culturales, los agüeros tienen un impacto emocional significativo. Estos rituales permiten a las personas sentir que tienen control sobre un futuro.

Además, los agüeros fomentan la conexión social. Realizarlos en grupo refuerza los lazos familiares y comunitarios, generando un sentido de unidad en una de las fechas más importantes del año.

Aunque no hay evidencia científica que respalde la efectividad de los agüeros, su valor cultural y emocional es innegable.