Foto: Vatican News

El Papa Francisco ha estado internado en la clínica Gemelli de Roma desde el pasado viernes 14 de febrero debido a una neumonía bilateral. Por fortuna, su salud no ha empeorado, de acuerdo con la información de la Oficina de Prensa de la santa sede «el sumo pontífice pasó una noche tranquila y esta mañana se despertó, desayunó y permaneció sentado en su sillón” sin embargo, desde ya se empiezan a rumorar algunos candidatos a ser el próximo Papa en caso de fallecimiento o renuncia del líder del Vaticano.

El Santo Padre se ha caracterizado por liderar bajo una doctrina progresista y de acuerdo con diferentes versiones, se espera que el sucesor siga su misma línea. Entre los más escuchados se encuentran los siguientes:

• El filipino Luis Antonio Tagle (67 años) es un cardenal cercano a la gente, entre sus pilares está la misericordia, la justicia social y la inclusión. 

Tomado de Vatican News

• El italiano Matteo Zuppi (69 años) es un cardenal de gran sensibilidad social, que está vinculado a la comunidad de Sant Egidio, conocida por mediar conflictos y tener un gran compromiso con las comunidades pobres, además de promover una imagen de la iglesia dialogante y abierta.

Tomado de Vatican News

• El ganhés Peter Turkson (76 años) es un cardenal moderado con responsabilidad social, abierto en temas de justicia económica, medio ambiente, no es tan progresista como Francisco, pero lo es sin ser tan disruptivo.

Tomado de El País

En una línea que mezcla aspectos del papa Francisco y su antecesor Benedicto XVI está:

• El italiano Pietro Parolin (70 años) hoy en día es secretario de Estado del Vaticano, por lo que es un cardenal poderoso dentro de la curia, ha estado en negociaciones importantes como los nombramientos de obispos en China, es diplomático de carrera, lo que lo caracteriza como una persona más institucionalista. 

Tomado de Vatican News

Por un lado más conservador y alineado a lo representado por Benedicto XVI se encuentra::

• El neerlandés Willem Eijk (71 años) es un cardenal conservador, opositor de la moral sexual y de la comunión de los divorciados que se casan de nuevo.

Tomado de Catholic News

• El húngaro Peter Erdő (72 años) es un cardenal conservador, ha participado en sínodos sobre la familia y la bioética.

Tomado de Vatican News 

• El estadounidense Raymond Leo Burke es un cardenal que representa el ala ultraconservadora de la iglesia, que se ha opuesto a la comunión de los divorciados que se casan de nuevo.

Tomado de Sovereign Order of Malta

• El alemán Gerhard Ludwig Müller es un cardenal crítico del papa Francisco en temas doctrinales.

Tomado de InfoVaticana

• El esrilanqués Malcolm Ranjith es un cardenal conservador, con énfasis en liturgia tradicional y doctrina moral. Ha sido crítico de Francisco.

Tomado de National Catholic Register

El periodista Edward Pentin ya había escrito en su libro,“El próximo papa”, la lista de 19 “papables” (cardenales elegibles), de los cuales actualmente quedan 9 al ser el resto mayores de 80 años.

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¿Cómo se elige un nuevo Papa?

De darse la sucesión, el procedimiento que se lleva a cabo cuando se debe elegir nuevo Papa se llama Cónclave y se realiza en la Capilla Sixtina con los cardenales de todo el mundo. 

Este proceso de selección llamado ha permanecido por más de 800 años y, aunque se considera un proceso democrático, la dinámica consiste en hacer varias rondas de votación hasta llegar a un consenso. Hay que tener en cuenta que los cardenales votantes deben ser menores de 80 años antes de empezar el Cónclave (252 cardenales tiene el Colegio Cardenalicio, de los cuales solo votan y asisten 138) según normas vigentes.

El Papa Francisco el 20 de octubre de 2024 anunció el nombramiento de 21 nuevos cardenales, entre ellos se destacaron algunos refuerzos para la legión latinoamericana con hombres de Brasil, Argentina, Ecuador, Perú y Chile. Este será el cónclave con mayor cantidad de cardenales, el más diverso y el menos eurocentrista, sin embargo, la mayoría de los votantes siguen siendo europeos.

Primero se realiza una eucaristía, donde se reúnen, desde 1858, en la Capilla Sixtina. Después, los demás salen del recinto, para dar inicio a la elección. En cada ronda eliminan candidatos e intercambian puntos de vistas entre ellos. Para tener Papa electo se necesitan la mayoría de los dos tercios de los votos, el proceso debe seguir hasta que el candidato logre el mínimo necesario, en el siglo XVI hubo una votación que llegó a durar 3 años. 

Las votaciones son secretas, cada votación se quema y con el color del humo, se determina si hay Papa o no. 

Luego de la votación, el cardenal decano le pide aceptar el ministerio al elegido al nuevo Papa, si acepta, debe elegir su nombre papal y se dirige a la “Sala de las lágrimas”. Allí, se viste con la ropa adecuada y es presentado ante las personas en el balcón de la Basílica de San Pedro.