Preste mucha atención a esta información porque si usted tiene planeado asistir este año al concierto de Shakira en Medellín, o al de Maluma, puede resultar estafado con la reventa. En Teleantioquia Noticias intentamos contactar a una de las empresas señaladas, pero hasta el momento no se pronuncian.
El deseo que tenía Luisa María Yepes de ir al concierto de Shakira en Medellín el próximo 23 de febrero, en el estadio Atanasio Girardot, se convirtió en una amarga experiencia porque fue víctima de una estafa. En el engaño podrían caer muchas personas por la convincente apariencia de legalidad que le dieron los delincuentes a la venta de la boleta. Ella buscó una alternativa de reventa porque en los canales oficiales la boletería rápidamente se agotó.
No deje de leer: VIDEO | ¿Qué le pasó al Metro de Medellín? Falla eléctrica en subestaciones de EPM afectaron el sistema de transporte
«Fue un perfil de Instagram que tenía 56.000 seguidores, la cuenta era verificada. Escribí al WhatsApp, por ahí fue todo el contacto, y me mandaron Cámara de Comercio, el RUT; verifiqué la información y todo estaba bien. Lo único que medio me alertó, fue que los comentarios en las publicaciones estaban bloqueados, pero no le paré bolas muchas bolas», narró la mujer afectada.
Así se consumó la estafa de las boletas para el concierto de Shakira
Luisa terminó consignando 900.000 pesos por una entrada cuyo valor de venta en canales autorizados era de 700.000. Hoy, 15 días después, ve con impotencia que el perfil de Instagram sigue ofertando boletas para el concierto de Shakira y para otros eventos.
En el perfil de Instagram, por ejemplo, hay una publicación con este texto: «¡La reina del rock latino está de regreso. No te pierdas la oportunidad de ver a Shakira en vivo! Shakira nos trae su magia y energía a las ciudades de Barranquilla, Medellín y Bogotá con su tour. ¡Compra tus boletos ya!»
«Me dieron cédula, me dieron nombre, entonces dije que esto era confiable. Luego de que transferí, me dijeron que tenía que esperar de 12 a 24 horas para que me enviaran el código QR, entonces les dije que por qué si eso se transfería en un minuto, ahí empecé a dudar», añadió Yepes.
A Luisa no le volvieron a contestar los mensajes y la bloquearon tanto en Instagram como WhatsApp. Ella instauró las denuncias y quejas pertinentes ante la Fiscalía, la Superintendencia de Industria y Comercio y la entidad bancaria de la cuenta a la que consignó. Hoy, sin boleta en mano, tuvo la iniciativa de hacer esta denuncia para evitar que otras personas caigan en manos de estos profesionales de la estafa.