El mundo está perdiendo uno de sus recursos más valiosos y menos comprendidos: el helio. Este gas, esencial para la ciencia, la medicina y la industria, no solo es irremplazable, sino que también está desapareciendo silenciosamente de nuestro planeta.
El helio se usa para purgar y presurizar los tanques de combustible de cohetes. Foto: NAS
Crisis de helio
En 2022, el Laboratorio Nacional del Pacífico Noroeste en EE. UU. fue uno de los muchos centros de investigación afectados por una severa escasez de helio. La falta de este recurso, obligó al equipo a suspender el funcionamiento de un espectrómetro de resonancia magnética nuclear único en su tipo.“El hecho de que tuviéramos que apagar ese instrumento fue devastador”, afirmó Nancy Washington, una de las investigadoras líderes del laboratorio.
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La historia de este laboratorio es solo un reflejo de un problema global. Suele relacionarse con globos de fiesta, lo cierto es que el helio es crucial para temas esenciales como:enfriar imanes superconductores en escáneres de resonancia magnética, en la fabricación de semiconductores, el desarrollo de baterías para autos eléctricos y la industria aeroespacial. «El helio es un elemento mágico, no hay nada igual en el universo» Afirma Sophia Hayes, profesora de química en la Universidad de Washington en San Luis.
Es un recurso finito
Lo más increíble y, al mismo tiempo, preocupante para muchos sectores es que el helio no se puede fabricar, solo se produce de forma natural. El problema radica en que gran parte del helio se extrae junto con el gas natural y, durante este proceso, muchas veces se libera y se pierde, la gran mayoría proviene del proceso de desintegración radiactiva de elementos como el uranio y el torio, que liberan pequeñas cantidades de helio durante miles de años.
Dado que no se puede sintetizar ni recuperar fácilmente, la escasez se está convirtiendo en una preocupación global, sobre todo, para sectores como la medicina, la física cuántica y la industria aeroespacial.
Además, su uso suele ser poco eficiente: se libera fácilmente al ambiente y, por ser tan ligero, se escapa al espacio sin posibilidad de recuperación.
El helio también en instalaciones de super-alta tecnología
Everett Collection / Cordon Press
¿Un futuro sin helio?
Mientras tanto, científicos e ingenieros exploran soluciones: desde escáneres de resonancia que usan solo un litro de helio hasta sistemas de reciclaje que pueden recuperar hasta el 90% del gas utilizado. También se están explorando nuevos yacimientos, como uno prometedor en Tanzania que comenzará a operar este año.
Pero los expertos advierten que estas medidas son apenas un comienzo. “Si no actuamos ahora, llegará el día en que no haya suficiente helio para una resonancia magnética o para lanzar un satélite”, alerta Christopher Ballentine, geoquímico de la Universidad de Oxford.