Imágenes tomadas del programa No es Cuento de Teleantioquia

En el corazón de un bosque dentro del área metropolitana de Medellín, No es Cuento, el programa de Teleantioquia que explora historias y mitos propios de nuestra cultura antioqueña, se adentró en el mundo de la Wicca con Orlando José Aparicio y Luz Ramírez. Ambos, con pasados profundamente ligados al catolicismo, encontraron en esta tradición esotérica un camino de espiritualidad y conexión con la naturaleza.

Orlando, quien en su juventud pertenecía a la orden de los dominicos, siempre tuvo la inquietud de buscar la verdad. Fue esta misma búsqueda la que lo llevó a alejarse del catolicismo y a conocer diversas prácticas espirituales. En ese camino, descubrió la Wicca, una religión de raíz pagana que, según él, le permitió encontrar el equilibrio entre lo material y lo espiritual.

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Por su parte, Luz Ramírez, quien desde la adolescencia se destacó como catequista y estuvo a punto de convertirse en monja, experimentó una crisis de fe que la llevó primero al ateísmo y, más tarde, a descubrir la Wicca a través de una amiga. Con el tiempo, se convirtió en sacerdotisa wiccana, encontrando en esta religión un espacio de libertad y reconexión con la naturaleza y su mundo interior.

¿En que consiste la religión Wicca?

Orlando explica que la Wicca se nutre de diversas tradiciones esotéricas y mágicas, buscando la armonía entre el mundo físico y el espiritual. Se trata de una religión que respeta la naturaleza y encuentra en ella una fuente de energía y sabiduría. Para él, el paganismo le ha permitido conocer distintas corrientes espirituales sin juzgarlas, formando su propia visión de la verdad.

Uno de los elementos dentro de la Wicca es el Libro de Sombras, un compendio personal en el que los practicantes registran conocimientos sobre plantas medicinales, rituales y experiencias mágicas. Orlando explica que, en la antigüedad, estos libros se ocultaban bajo el piso de madera debido a la persecución de quienes practicaban estas tradiciones, lo que originó la connotación negativa del término «bruja».

El ritual a Hécate: 

Durante el episodio de No es Cuento, Orlando y Luz realizaron un ritual en honor a Hécate, una deidad de la mitología griega vinculada con la brujería, la magia y la encrucijada entre el mundo espiritual y terrenal. Según Luz, este ritual busca agradecer a Hécate y pedir su bendición. En su experiencia, la deidad le ha otorgado fortaleza para enfrentar los prejuicios y críticas que ha recibido por su elección espiritual.

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Orlando, también compartió su visión sobre Hécate, describiéndola como una diosa que otorga lo que realmente conviene a sus seguidores. Para él, es una figura materna dentro de la tradición wiccana, ofreciendo guía y protección a quienes la honran.

Entre estigmas y aceptación

Aunque en Medellín Orlando no ha sentido señalamientos directos por su creencia, tampoco percibe una gran aceptación. Luz, por su parte, enfatiza que ser wiccana le ha enseñado a respetar todas las formas de vida y energías. «Soy bruja, pero no la bruja que muchos imaginan. No tengo un lunar ni vuelo en escoba. Soy una bruja que ama, respeta y entiende la energía», afirmó.

El episodio de No es Cuento permitió explorar una tradición espiritual poco conocida en la región, desmitificando creencias y mostrando la diversidad de caminos que las personas pueden recorrer en su búsqueda de la verdad. Míralo aquí: