Por medio de un concepto que entregó a la Corte Suprema de Justicia, la procuradora Margarita Cabello, aseguró que el uso habitual y compulsivo de sustancias alucinógenas o estupefacientes, sí debe ser una causal de disolución del matrimonio.
Por medio de un concepto que entregó a la Corte Suprema de Justicia, la procuradora Margarita Cabello, aseguró que el uso habitual y compulsivo de sustancias alucinógenas o estupefacientes, sí debe ser una causal de disolución del matrimonio.