Alrededor de 600 migrantes venezolanos llegan cada día a Medellín para tomar camino hacia Necoclí y el Tapón del Darién. Muchos dicen que prefieren arriesgar sus vidas antes que seguir viviendo en Venezuela o, incluso, en Colombia.
Alrededor de 600 migrantes venezolanos llegan cada día a Medellín para tomar camino hacia Necoclí y el Tapón del Darién. Muchos dicen que prefieren arriesgar sus vidas antes que seguir viviendo en Venezuela o, incluso, en Colombia.