Tras la muerte de su bebé recién nacido, la chimpancé decidió cargar con su cadáver y después de varios meses aceptó su pérdida y decidió soltarlo.
En febrero de este año, en el zoológico Bioparc de Valencia, España, Natalia, una chimpancé de la subespecie Pan troglodytes verus, sufrió la trágica pérdida de su cría recién nacida. El fallecimiento del bebé fue devastador para Natalia, quien, al igual que muchos primates en la naturaleza, no pudo separarse de su cría muerta.
Durante más de siete meses, cargó el cuerpo de su bebé a todas partes
El equipo de cuidadores de Bioparc tomó la decisión de respetar el duelo de Natalia y no intervenir, a pesar de que el cuerpo del pequeño chimpancé comenzó a descomponerse, causando sorpresa y en algunos casos, incomodidad entre los visitantes del zoológico. Sin embargo, para los especialistas, era evidente que permitir que Natalia viviera su duelo de manera natural sería la mejor opción para su bienestar mental y emocional.
Intervenir, según explicó el director de Bioparc Miguel Casares, hubiera implicado anestesiar a Natalia y a varios otros animales del recinto para poder quitarle al bebé. Además, cortar el proceso de duelo de manera abrupta podría haber resultado más traumático para ella. Por ello, decidieron observarla de cerca y darle el tiempo necesario para que, por sí misma, pudiera soltar el cuerpo de su cría.
#Internacional | Después de 7 meses de duelo, chimpancé Natalia suelta a su bebé fallecido.#Natalia #Chimpancé #Bebé #Viral pic.twitter.com/lrk6FKoTTw
— ¡PUM! Pereira Último Minuto (@MINUTOPEREIRA) September 30, 2024
Este comportamiento no es inusual entre los chimpancés. En la naturaleza, es común que las madres mantengan el cuerpo de sus crías fallecidas durante días, semanas e incluso meses, mientras procesan la pérdida. En el caso de Natalia, sin embargo, este proceso de duelo tuvo lugar a la vista de miles de visitantes del Bioparc, lo que generó más impacto en el público y en los propios cuidadores.
«De pronto, Natalia se desprendió de él, lo depositó en el suelo y no volvió a atenderlo», comentaron los cuidadores al diario El Español. Fue en ese momento cuando los profesionales pudieron recuperar el cuerpo de la cría, lo que marcó el fin del duelo de la chimpancé. Para el equipo de Bioparc, este suceso representó un éxito, ya que se comprobó que permitir que el animal viviera su proceso de forma natural fue la mejor decisión.
Este no fue el primer duelo que Natalia tuvo que enfrentar. En 2018, también perdió a otra cría, lo que preocupó aún más a los expertos, quienes temían que este segundo golpe fuera devastador para ella. Sin embargo, a pesar de la gravedad de la situación, Natalia continuó con sus actividades diarias, siempre con el cuerpo de su bebé en brazos.
La chimpancé comía, se desplazaba y socializaba, aunque nunca soltaba el cadáver de su cría
Nuestra especie se siente única entre especies. Pero, ¿es tan única como creemos? En la reacción a la muerte de familiares, no tanto. Aquí os dejo el duelo de Natalia, en Bioparc (Valencia). Una chimpancé que perdió a su bebé hace 4 meses y, desde entonces, no lo ha abandonado ⬇️ pic.twitter.com/RWSS7WfIiV
— Roberto García-Roa (@RGarcia_Roa) June 23, 2024
Este comportamiento es una muestra más de que, al igual que los humanos, los primates son capaces de sentir dolor ante la pérdida de un ser querido y de vivir un proceso de luto.
A pesar de la tragedia, no todo ha sido desolador para Natalia. La chimpancé dio a luz a dos crías en febrero, y aunque perdió a una, la otra ha sobrevivido y actualmente está bien.
El personal del zoológico celebró la fortaleza de Natalia y el hecho de que, por fin, haya podido cerrar este doloroso capítulo por cuenta propia.
