En medio de intensas lluvias, Cocorná sufre graves daños; se declaran calamidades públicas en 12 municipios de Antioquia.
Las fuertes lluvias que han azotado la región de Antioquia en los últimos días han dejado grandes daños, siendo Cocorná uno de los municipios más afectados. Un vendaval ha destrozado los techos de al menos 30 viviendas en el casco urbano, impactando a 26 familias. Este fenómeno ha suscitado un llamado urgente a la acción por parte de las autoridades locales, que buscan mitigar los daños y garantizar la seguridad de los habitantes.
Según informes del Departamento de Gestión del Riesgo de Antioquia (Dagran), además de Cocorná, el municipio de Granada también reportó daños significativos, con al menos 10 viviendas sufriendo destechamiento. En Caucasia, las lluvias han provocado inundaciones en varios barrios, incluyendo Los Córdova, complicando aún más la situación.
La situación ha llevado a las autoridades a emitir alertas sobre el aumento de las precipitaciones en la región. El director del Dagran, Carlos Rios Puerta, en una reciente rueda de prensa, hizo un llamado a la comunidad para que refuercen los techos de sus viviendas y sigan las recomendaciones de seguridad.
El Dagran ha implementado un sistema de alerta y monitoreo, con 118 instrumentos instalados en las quebradas del departamento. Esto permite una reacción rápida y coordinada ante cualquier eventualidad, garantizando la seguridad de los ciudadanos en tiempo real.
Actualmente, 85 municipios en Antioquia se encuentran en riesgo de deslizamientos de tierra y más de 64 por inundación. La magnitud de la crisis ha llevado a 12 municipios a declarar calamidad pública, lo que les permite acceder a recursos adicionales para ayudar a los damnificados y reparar las infraestructuras afectadas.
Las autoridades también están trabajando en conjunto con las comunidades locales para asegurar que la información sobre riesgos y alertas sea clara y accesible. “Es esencial que los habitantes conozcan su entorno y reporten cualquier afectación”, señaló el director del Dagran.
El impacto de este vendaval es profundo y abarca no solo las estructuras físicas, sino también la estabilidad emocional de las familias afectadas.
Los esfuerzos de recuperación ya han comenzado, con brigadas de voluntarios y funcionarios trabajando para ayudar a los damnificados.
En respuesta a esta situación crítica, las autoridades han decidido implementar medidas de prevención adicionales. Se realizarán charlas informativas en las comunidades para educar sobre la importancia de las medidas preventivas y el autocuidado ante fenómenos naturales. Estas iniciativas buscan no solo ayudar en la recuperación actual, sino también preparar a las comunidades para futuros eventos climáticos adversos.