Cinco miembros de la Policía Metropolitana fueron capturados y judicializados porque habrían hecho un allanamiento sin orden judicial, en el que se habrían apoderado de un arma de fuego y habrían extorsionado al propietario de la finca ubicada en el municipio de Girardota.

Los policías fueron capturados por un falso allanamiento en una finca de Girardota.

Los policías fueron capturados por miembros de la Dijín. Foto: archivo.

El intendente Juan Francisco Mancilla Barbosa, los subintendentes Carlos Andrés Jiménez Noguera y Cristian David Valencia Valencia y los patrulleros Jeisson Fernando Rolón Sepúlveda y Thyana Karina Rodríguez Melo son los sospechosos de haber realizado el falso allanamiento en una finca de Girardota.

«El 8 de julio de 2024, el intendente Juan Francisco Mancilla Barbosa y la patrullera Thyana Karina Rodríguez Melo, presuntamente, presentaron documentos falsos a un fiscal de la Unidad de Reacción Inmediata (URI). Este les autorizó 2 diligencias de allanamiento y registro en 2 inmuebles, entre los cuales se encuentra el ya mencionado», indicó la Fiscalía.

¿En el falso allanamiento en una finca de Girardota también hubo una extorsión y un robo?

Los uniformados, que pertenecían al Grupo de Contra Atracos de la Sijín de la Policía Metropolitana, también habrían exigido 150 millones de pesos al propietario de la finca, a cambio de no judicializarlo por el delito de porte ilegal de armas de fuego. La víctima, al parecer, entregó 20 millones de pesos. En el falso allanamiento habrían participado los 5 sospechosos.

«Durante el supuesto allanamiento, al parecer, encontraron una subametralladora calibre 9 milímetros, la cual no fue reportada ni dejada a disposición del despacho que ordenó la diligencia. Además, se evidenció que uno de los policiales se habría apropiado de una camándula de oro, avaluada en 40 millones de pesos», añadió la Fiscalía.

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A los 5 procesados les imputaron cargos por los delitos de falsedad ideológica en documento público, fraude procesal, peculado por apropiación y concusión. Ninguno los aceptó y a todos un juez penal les impuso medida de aseguramiento.