Si bien los tiempos que vivimos son complejos y los cambios difíciles de asimilar, no podemos desconocer que el ser humano ha enfrentado a lo largo de la historia diversos cambios trascendentales a los que ha tenido que adaptarse para que la especie pueda sobrevivir.
Uno de esos procesos de adaptación al cambio se vive, precisamente, en desarrollo de la pandemia del COVID-19, en la que hemos tenido que interiorizar nuevos hábitos y modos de vivir que han traído a nuestra vida, en muchas ocasiones, estrés, ansiedad y desconcierto.
Todas estas emociones, de igual manera, han impactado diversas áreas de la vida. Una de ellas es la sexualidad en tiempos de pandemia, pues, un estudio realizado a 2.444 personas, llevado a cabo por Profamilia y dirigido por la Universidad de Gante en Bélgica y el London School of Hygiene and Tropical Medicine de Inglaterra, informó que el 30% de las personas encuestadas disminuyó la frecuencia de la actividad sexual con su pareja, mientras que el 18% informó de un aumento en la misma.
Por su parte, frente a la práctica de la masturbación, el 35% de los encuestados respondió que la frecuencia aumentó, mientras que un 32% la disminuyó, y el consumo de pornografía arrojó que un 27% de las personas lo aumentó y el 35% lo disminuyó.
Estos resultados permiten identificar que las afectaciones del COVID-19 no solo alcanzan los temas de salud física y mental, sino que incide en otros aspectos del bienestar de las personas, como es el caso de las prácticas sexuales. El estudio visibilizó, además, que el porcentaje de poco satisfecho con su vida sexual subió del 22%, previo a la pandemia, al 43% durante las medidas de confinamiento.
De este tema hablamos en nuestro programa #DeManeraSingular del 13 de abril, con la experta en crecimiento sexual y de pareja, Ana Sofía Giraldo, quien nos dio algunas recomendaciones importantes para que, aun en medio de la pandemia, podamos crear espacios de intimidad con nuestra pareja y seguir disfrutando la sexualidad:
- Generar espacios propicios para compartir con la pareja. Para esto es importante un ambiente de soledad e intimidad. Recomendable es, también, apagar los dispositivos celulares y equipos tecnológicos. Estos representan distracción.
- La literatura erótica puede ser una herramienta valiosa para ayudar a construir ese deseo sexual en medio de la cotidianidad.
- El amor se debe cultivar, pero el deseo sexual se debe construir. La pareja debe proponer acciones para hacerlo.
- Respetar y cuidar los espacios que se dedican o utilizan para la intimidad en pareja.
- Aunque estemos en modalidad de teletrabajo, debemos marcar un límite en nuestros horarios laborales, pues la hiperconectividad digital y las jornadas prolongadas de trabajo generan un mayor estrés, lo que causa que el deseo sexual se vea afectado.
- Las cargas mentales deben estar balanceadas. Es imprescindible implementar estrategias que permitan, tanto a mujeres como hombres, reducir su carga mental.
Si quieres conocer más del tema puedes ver todo el capítulo completo de #DeManeraSingular
Por último, vale la pena mencionar que el estrés es el factor que más determina la vida sexual. Cuanto mayor estrés se presenta, mayor será la disminución del deseo sexual, pues esto genera agotamiento, fatiga y cansancio.
Hoy muchos están más enfocados en pasar rápido esta etapa. Sin embargo, es fundamental entender que, si bien debemos cuidarnos de un contagio de COVID-19, la salud y el bienestar están compuestos de muchos otros elementos, entre ellos la vida sexual.